COCHINO SISTEMA CAPITALISTA

Hace muchos años el entonces joven profesor y pequeño filósofo les hablaba a sus alumnos del Sistema Capitalista. Lo ponía a parir y les explicaba las maldades intrínsecas de dicho sistema: Sólo busca el máximo beneficio de los que ya tienen beneficios, sólo profundiza en las desigualdades sociales entre ricos y pobres, solo defiende y aumenta la sagrada propiedad privada y sólo se guía por las sagradas leyes del mercado, la ley de la oferta y la demanda. Resumía gráficamente sus críticas llamándolo COCHINO SISTEMA CAPITALISTA. Los alumnos de clase media-alta le escuchaban con recelo, le tildaban de rojillo y le perdonaban sus tendencias izquierdistas, porque parecía honesto aunque un poco ingenuo. A aquellos alumnos las cosas les iban bien, tan bien que hasta podían ir a un colegio privado, al mejor colegio de la zona. Al joven profesor tampoco le iban mal las cosas, aunque a veces se preguntaba qué estaba haciendo él en un colegio privado y diciendo esas cosas.
Les hablaba también de que el cochino sistema capitalista tenía crisis cíclicas y que en ellas se mostraba su verdadera cara explotadora y brutal que machacaba a las clases desfavorecidas, las mismas de siempre. Y hasta les “deseaba” a sus alumnos que les tocase una de esas crisis para que despertaran y vieran lo que era bueno, la verdadera cara del cochino sistema. Yo creo que muy pocos le creían y hasta lo consideraban tendencioso, pero todos le perdonaban tanto atrevimiento.
Les explicaba también el pensamiento de Marx, el marxismo. ¡Qué cosas pasadas de moda y ya tan antiguas! Pues sí, les explicaba que la Infraestructura determina a la Superestructura, que la Economía condiciona la Política. Que el Sistema Cochino Capitalista entrará en contradicciones consigo mismo y propiciará un Cambio económico y político. A algunos les parecía interesante este pensamiento marxista de izquierdas, pero a muchos les sonaba a tendencioso, rojillo y anticuado, aunque había que estudiarlo para sacar buena nota.
Mira que se esforzaba el pequeño filósofo para hacerles ver los aciertos del pensamiento de Marx, para crear personas críticas contra el maravilloso sistema liberal capitalista. No sabe si conseguía despertar la conciencia de aquellos jóvenes bien posicionados en dicho sistema, pero lo intentaba.
Ahora se acuerda y mucho de aquellas clases, de aquellos alumnos. Él cree que sus antiguos alumnos se acordarán de aquello que decía. No tendrán más remedio que reconocer que aquel profesor tenía razón, que era adivino, que el marxismo acertaba con sus análisis. Ahora vemos una vez más la cara del Cochino Sistema Capitalista: Los Mercados dirigen el mundo y la política y los gobiernos. La crisis golpea a los de siempre, a los trabajadores, a los servicios sociales. La Democracia está en manos de los señores de la guerra, de los señores del Capital. Si la Democracia triunfó cuando desactivamos a los nobles y al clero, quizá ahora hay que desactivar y anular a los bancos, a los grupos financieros, a los grupos de inversión, a los capitalistas.
“El problema no es la Crisis, el problema es el Sistema”, decía alguna pancarta de los “Indignados”. Pero si eso ya lo dijo Marx hace un siglo y el pequeño filósofo hace más de 30 años que lo fue repitiendo todos los años.

¡Cuánta Rabia y cuánta Nostalgia!